Esta pandemia ha sido una experiencia singular, desconocida en sus inicios tanto para la ciencia como para el ciudadano común, aciertos y desaciertos, prueba y error de muchos esquemas de tratamiento, con mis conocimientos sobre plantas medicinales intente apoyar con unas indicaciones utilizando la hoja de guayaba por sus propiedades ampliamente descritas. Mi deseo de compartir y ayudar también ha traído sus repercusiones.
Inicialmente Facebook borro mis artículos en dos ocasiones. El primer artículo se había compartido más de 5,000 mil veces cuando lo borraron. El segundo artículo se compartió más 11,000 veces y también lo borraron. El tercer artículo que escribí logro quedarse en Facebook y se compartió más de 10,000 veces. Mi di cuenta que eran los administradores de Facebook que borran cualquier cosa que puede ser fake news. Por la tanto aprendí que lenguaje debía utilizar para evitar que los artículos fuesen borrados.
Estos números solo importan porque entre más se conocen las recetas, más personas se pueden ayudar. Las plantas son sagradas y son nuestras mejores aliadas desde que el ser humano tiene memoria. Todavía nos siguen llamando, pidiendo que las oigamos. La ciencia está para estudiar cada una de sus propiedades las cuales eran conocidas por nuestros antepasados y se han utilizado empíricamente, esa es la base de la farmacología clínica convertida por transnacionales farmacéuticas en patrimonio de pocos. La naturaleza está ahí a nuestra disposición y la sabiduría milenaria de cómo usarlas en nuestro beneficio también.
También descubrí que diferentes organizaciones, periódicos, profesores y científicos se tomaron el tiempo y esfuerzo para intentar desacreditar las recetas. Lo más irónico es que lo hicieron sin probarla. Ni una sola persona de las que intenta desacreditar el poder curativo de la hoja de guayaba y desacreditar a mi persona ha tenido experiencia con su uso. Sin embargo los testimonios de personas que usaron la hoja de guayaba con resultados positivos siguen apilándose en mi correo electrónico con historias de personas que curaron. Personas con diagnósticos positivos. Para que se den cuenta del esfuerzo que han hecho para desacreditar esta receta les comparto todos los artículos que encontré escritos en mi contra:
Lamento mucho que aun documentando científicamente las propiedades de la hoja de guayaba resulto ser muy poco para las personas dedicadas a la ciencia, ellos solicitan estudios relacionados con COVID pero lo cierto es que la pandemia no le dio tiempo a nadie para estas cosas y es por eso que vimos a la OMS cambiar en múltiples ocasiones su opinión con el uso de muchos fármacos. Personalmente les puedo concluir que revisé ampliamente y muy a conciencia lo que la comunidad científica indicaba sobre la fisiopatología de la enfermedad y en base a esto aplique los conocimientos de herbologia que pudieran ayudar a mitigar los síntomas con mi único interés de ayudar. No pertenezco a un grupo, ni tengo un laboratorio especializado, ni un equipo de investigadores para realizar los estudios multicéntricos que muchos piden.
Espero que puedan darse un poco de tiempo en revisar los testimonios de las personas que lo usaron con buen resultado y partiendo de esa premisa puedan ustedes desarrollar protocolos de estudios científicos ya que los beneficios fueron muchos. Esa es la base del método científico, Observación y puedo afirmarles que la observación está hecha, la planta de guayaba nos ofreció sus hojas y ella funciono contra el COVID 19.
De eso se trata el espíritu científico, de descubrir todo lo que puede ayudar a la humanidad. Es mi sincero deseo que universidades, laboratorios, periodistas independientes le den una mirada seria a los testimonios del pueblo y consideren seriamente estudiar los beneficios de la hoja de guayaba.
Soy herborista. Estoy satisfecho con los resultados que el mismo pueblo me ha retroalimentado, ellos saben lo que han vivido. Son muchísimas la persona que se han ayudado con las hojas de guayaba para que sea fake news. El pueblo de las Américas no puede estar mintiendo colectivamente. No son pagados para mentir. Si les han servido de apoyo estas recetas ante esta enfermedad y con eso mi corazón está en paz.